MarinaLab. Coproducción urbana y ciudadana
La ciudad de hoy necesita de nuevos modos de producción que habiliten y potencien las relaciones entre ciudadanos, técnicos, profesionales, constructores, instituciones, administraciones y procesos materiales derivados del entendimiento de una construcción colectiva en el día a día. La coproducción, entonces, no es un término nominativo, sino un proceso. La coproducción ocurre o no ocurre. Sucede, se posibilita, se experimenta o simplemente se nombra sin que nada cambie.
prototipos, facilitación, arquitecturas.
2018—03
prototipos, facilitación, arquitecturas.
2018—03
Coproducir un Parque en San Sebastián de los Reyes.
En términos de gobernanza, podemos entender la coproducción como una interacción necesaria entre administraciones, empresas y ciudadanía. Pero en una experiencia urbana que es socio-técnica y socio-material, la coproducción se alía con muchas más entidades que los agentes tradicionales. El medio, los objetos que lo componen, los relatos, la atmósfera, las plantas y el ecosistema, los animales domésticos y salvajes, el agua, la energía, etc. Todo ello coproduce un ensamblaje que compone nuestro día a día. En el Parque de la Marina de San Sebastián de los Reyes también. Una gobernanza colaborada en los procesos que desarrollan la ciudad puede producirse desde el entendimiento de cómo ésta puede desarrollarse sin consumir más territorio sino repensando y evolucionando lo existente en base a ideas, herramientas, espacios y tiempos basado en modos de relaciones heterogéneas entre diferentes agentes que componen lo urbano
¿Por qué una coproducción en La Marina?
Pensar el futuro de un área urbana o un parque, es pensar en un futuro social, ecológico y económico, pero también tecnológico y material. Una interacción progresiva entre entidades diferentes. Pasar de la idea de la sostenibilidad, como el sostenimiento o mantenimiento de lo que conocemos, a pensar en términos de adaptación y reutilización de recursos o conocimientos es una vía diferente. La coproducción urbana, es un reto no sólo para pensar en espacios futuros sino para adaptar un presente. La Marina ha sido un espacio militarizado durante más de 30 años en S.S. de los Reyes y dado que está elevado en el centro de la ciudad, paradójicamente ha sido invisible a ojos de los ciudadanos. Para visibilizarlo, se han realizado procesos específicos y graduales hasta que el pasado día 6 de febrero La Marina abrió sus puertas a los ciudadanos.
Pensar en la interacción, la copresencia de agentes diversos, y la corresponsabilidad sobre las ideas, lo dicho y lo por hacer, es tarea de todas en un proceso que ya marca un hito en la participación urbana, pues no es un proceso de consulta participativa, sino un proceso de coproducción urbana. Por lo tanto, el proceso que planteamos para La Marina, no trata tanto de desvelar ideas para que otros las lleven a cabo en el parque, sino para testear el nivel de colaboración sobre ideas-procesos-proyectos que podamos prototipar para después testear en un proceso a corto y medio plazo. Este proceso requerirá también coinversión, o establecer los diferentes recursos y capitales urbanos que diferentes agentes pueden poner sobre la mesa de diseño del propio parque. Parque. El dinero es sólo uno de los recursos posibles.
También nos parece importante señalar que la coproducción, no tiene porque limitarse a una coproducción en consenso. Coproducir, es también cooperar en la diferencia, es pensar en agencias inesperadas, alianzas no previstas, choques chispeantes entre diferentes. Una idea-proceso-proyecto, no tiene porque anular otro. No tienen porqué coexistir, pensemos también como pueden coinsistir. Es una posibilidad para ser diversos con lo diferente.
Coproducir es pensar en un Urbanismo Progresivo.
El proceso que se plantea en la Marina, es un proceso middle-out que permite tomar decisiones progresivas. Para ello, las labores de mapeo y diagnóstico participado, el detonador de procesos, el prototipo de procesos-proyectos, su testeo y su evaluación, forman parte de un ciclo de vida del urbanismo progresivo. No hay que hacerlo todo, ya. No hay que decidirlo todo ahora. El urbanismo progresivo permite alimentar un proceso en continuidad y simultaneidad con otros procesos que se dan ya en San Sebastián de los Reyes. Es una garantía para fortalecer los tejidos existentes sean estos sociales, productivos, empresariales o afectivos, y pensar en la coproducción como el ADN de un proceso a corto, medio y largo plazo.
Para ello, y de manera sencilla, elaboramos una metodología en tres partes:
La primera, siempre necesaria y cada vez más vinculante es detectar las capacidades y conocimiento ciudadanos ya existente. Iniciativas ciudadanas, asociaciones formales, grupos informales, que ya operan en el entorno de S.S de los Reyes y que aún no se conocen ni reconocen.
La segunda una puesta en común de ideas-procesos, siempre desde la experiencia personal y desde un pensamiento complejo de su iniciación, gestión y apertura.
Por último una selección de ideas-procesos para prototiparlas como ideas-proyecto desde puntos de vista diferentes en términos de género, accesibilidad, inclusión, alcance, cogestión, cuidado, etc.… En base a estas tres fases, el proceso de participación de La Marina, dará lugar a dos tipos de procesos. Un documento colaborativo con el proceso de participación, y a la vez varios proyectos prototipados para ser testeados en el propio parque de La Marina.
La coproducción entonces, es la forma de entender un pensamiento en acción de manera colectiva aplicado sobre un entorno urbano. El parque nos enseñará muchas cosas, el trabajo ciudadano también, y el proceso nos permitirá testear los límites de la participación como puesta en acción de proyectos urbanos de manera directa, es decir, progresiva.
Una infraestructura ciudadana coproducida: marinalab.
Cómo parte del proceso, hemos ya coproducido una infraestructura ciudadana dentro del parque de La Marina, que tiene varias funciones operativas y simbólicas.
- Explorar, observar y mapear el parque actualmente desconocido para la ciudadanía.
- Visibilizar el proceso de participación y la existencia del Parque de La Marina.
- Servir como lugar de encuentro para los procesos participativos y presentaciones.
- Dotar de una pequeña infraestructura de confort dentro del parque.
- Ser un símbolo del proceso de participación y coproducción del nuevo parque de la marina.
- Desplegar cierta autonomía energética desde la instalación de paneles de energía solar fotovoltáica. Esta es la única fuente de energía que posee el parque actualmente.
- Enlazar la apertura de puertas del parque con el proceso de participación.
Esta infraestructura opera como un espacio afectivo donde las redes de ciudadanos e iniciativas, las existentes y las emergentes se vinculan a ella como soporte y enlace para muchas otras actividades. En ella se desarrolla parte del proceso participativo según las dimensiones de participación, número de agentes, climatología, etc. El propio laboratorio de La Marina se ha desarrollado en un proceso de coproducción entre el ayuntamiento de S.S: de los Reyes, empresas privadas como Turboiber y Pleno Acceso, iniciativas ciudadanas como Metrohuerto, Consuma Eficiencia o el Instituto DIY, Trifocal y codiseñado y construido por el Vivero de Iniciativas Ciudadanas junto a Todo por la Praxis. El proceso de codiseño se aumentará con la puesta en marcha de marinalab y los prototipos de proyectos que se detonen en el proceso.
Por último, toda esta puesta en marcha se apoya en la plataforma digital conquistalamarina.es puesta en funcionamiento por el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes, que recoge las ideas de los ciudadanos de Sanse y que apoya y sirve de soporte no presencial para el proceso de participación y coproducción.
Todo ello permitirá ayudar a definir el carácter, identidad y futuro desarrollo de La Marina, apostando por varias líneas de acción en su constitución como espacio común urbano que explore las potencialidades internas existentes y aproveche las sinergias y experiencias externas de valor. Que detone procesos innovadores para afrontar los retos actuales que tenemos en nuestras ciudades, ecosistemas y que tienen un alcance más amplio que lo local. El parque ya desmilitarizado, permite que la coproducción urbana enriquezca los procesos presentes y futuros entre la administración pública, las instituciones, las empresas locales y las iniciativas ciudadanas agrupando a toda la sociedad civil en un nuevo nodo urbano, cultural y medioambiental innovador a partir de la recuperación y puesta en valor del parque existente y el conocimiento ciudadano emergente.